21 de agosto de 2015

Roadtrip de Barcelona a Croacia: Día 6 Rovinj

Por fin nos toca un día sin conducir!!! nada de furgo, nada de preparar ruta, nada de mirar el próximo destino, nada de mirar gasolina, nada de nada....simplemente RELAX.


Alrededores de Rovinj: islas de Crveni Otok y Maskin.

Hoy hemos decidido plantarnos en la ciudad, la idea es primero ver algo de los alrededores de Rovinj y ya por la tarde recorrer el casco antiguo más a consciencia. Nos decidimos por ir a la zona del puerto (pasando ante por el Mercado de frutas y verduras y pagando a precio para guiris la fruta que, eso si, estaba deliciosa) y coger uno de los barcos que nos llevan a alguna de las dos famosas islas que hay cercanas: Crveni Otok o Sveta Katarina.


Hay unos taxi-boat regulares que te llevan (trayecto 15-20 minutos), pero en nuestro caso conseguimos uno privado, solo ir al puerto seguro que podréis encontrar a personas que os ofrezcan los servicios para llevaros a las islas (nuestro taxista fue Ducki y su teléfono el 00385995772648). Fue un acierto puesto que no dependíamos de horarios ya que nos dio su teléfono para pasarnos a recoger en el momento que quisiéramos y además a la vuelta nos llevó directo al camping.


Nos decidimos por Crveni Otok o también conocida como Isla Roja. Se trata de dos islas conectadas por una pasarela en mitad del Adriático. La primera isla que es donde habitualmente te dejan los botes no te dice mucho al llegar. Un hotelazo preside las vistas y por la parte de atrás una calita de agua transparente rodeada de hamacas, zona de juego para niños, chiringuito, escuela de buceo, etc. Os recomiendo cruzar la pasarela e ir hacia la otra isla llamada Maskin, mucho más tranquila y mucho más autentica.


Por todos lados hay pequeñas calitas rocosas y se trata de elegir la más cómoda y la que tenga mejor facilidad para entrar y salir del agua por las rocas.


Una de las curiosidades de la isla es la cantidad de bancos que hay orientados a mar, un placer sentarse un rato en alguno de ellos y relajarte o bien aprovechar para un estupenda siesta.
Hay un restaurante estilo barbacoa en la zona más extrema de la isla, está indicado así que si no lleváis comida no hay que preocuparse.


En nuestro caso disfrutamos menos de lo que quisimos de la paz de la isla, pues nos pilló una lluvia que no nos dejó quedarnos y fue una suerte tener el teléfono de nuestro taxista particular para llevarnos al camping. 

Una vez allí el tiempo quiso jugar con nosotras y salió un sol impresionante, así que decidimos bajar a la propia playa del camping y simplemente disfrutar del sol un rato.


El casco antiguo de Rovinj.

Ya con las pilas cargadas nos vamos a ver la maravillosa ciudad de Rovinj, así que decidimos ir caminando desde el camping para ir disfrutando de las vistas.


La idea era visitar principalmente su centro histórico lleno de moda independiente, de pintura, de rincones inspiradores, de tiendecitas bohemias, de restaurantes con estilo, de rincones con encanto especial, lleno de vida en la calle y además coincidimos con las fiestas del pueblo así que imaginaros.

Para visitar el casco antiguo, lo mejor es hacerlo sin absolutamente ningún tipo de mapa. Callejear y darte cuenta que es imposible perderte pues se trata de unas cinco calles "principales" por las que se cruzan otras callejuelas.


Una de esas calles es la famosa Grisia, llena de artistas, pintada por cientos de autores y donde algunas de sus tiendecitas tienen un estilo muy peculiar en el que vale la pena entretenerse un rato.

La calle Kriza tiene buena variedad de restaurantes y sitios de copas donde tomar algo con unas vistas difíciles de olvidar.


La Via Svalba que seria la primera que encontramos si entramos por la zona del mercado, tiene varias tiendas, y unos estupendos rincones con vistas la mar.



La Iglesia de Santa Eufemia corona lo alto del casco antiguo y es un punto de encuentro para los habitantes, para sentarse en sus escalera y disfrutar de las vistas.


Hay un café justo bajando la escalinata de la iglesia que es un buen escenario para disfrutar de la puesta de sol.



Para continuar con la ruta la mejor opción es ir hacia el puerto y bordearlo por Obala Alda Rismonda, llena de terrazas y ambiente como casi toda la zona. Este paseo puedes hacerlo tan largo como quieras hasta llegar al hotel Park y seguir si quieres por el Parque Forestal Punta Corrente.


Encontramos las fiestas del pueblo y nos unimos al ambiente primero cenando en la verbena local unos pescaditos y tomando cerveza y vino local. Para ello volvimos a la zona del puerto y allí habían los puestos de tentempiés. Estos puestos en la época de verano se ponen cada domingo y miércoles y os aconsejo acercaros a verlo y vivirlo.

Buena parte de la música era italiana, imaginaros nuestro arte cuando sonó Maria Dolores de los Gipsy Kings 
Lo único que no os recomiendo es el cocktail que nos tomamos post cena....un invento extraño.


Algunas anotaciones prácticas.

La localidad de Rovinj tiene todos los servicios que podáis necesitar:


  • Los bancos están situados justo en la entrada del casco antiguo, antes de la zona del Mercado de frutas y verduras. Disponéis de varias tiendas de cambio por el pueblo, pero el tipo es bastante inferior al que podéis tener en banco.
  • Hay estación de autobús para ir a otros puntos del país. Está situada pasado el puerto por detrás del Hotel Park.
  • En esa misma zona está la oficina principal de correos.
  • La variedad de restaurantes en Rovinj es impresionante: Male Madlene donde probar platos caseros de cocina italiana y croatas y donde es necesario reservar; Kantinon donde probar platos de pescado y marisco y otros platos de comida 100% croata; un restaurante situado en el mismo mercado, no recuerdo el nombre pero tiene mesas rectangulares grandes fuera para que los comensales vayan tomando asiento y compartan mesa pues no están separadas. Probamos una recomendación de Lonely que no nos gustó mucho, está justo al lado de este y se llama Grota, es estilo taberna para picar y tomar algún vino (ni las tapas, ni los vinos, ni el personal nos gustó demasiado)

  • Hay varias coctelerias con vistas al mar, principalmente en la calle Kriza, una de ellas para darte un lujo sería Valentino...con ese nombre lamento no haber ido!!!! Pero ya no dimos para más.
  • Para comprar además del famoso mercado que tiene unos precios desorbitados, hay varios Konzum y un supermercado también junto a la estación de autobuses. Nosotras cargamos antes de llegar al pueblo puesto que a las afueras había un Lidl bastante grande.

Kilómetros totales: 0
Precio Camping Porton Biondi: 29,49€


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